Es parte de un ciclo
GRUPO REFORMA
La recuperación que ha tenido el lago de Chapala, desde el 2003 a la fecha, es parte de un ciclo que desde tiempos inmemorables han observado los nativos del poblado de Mezcala.
Según Exciquio Santiago, cronista de la comunidad ribereña, Chapala tiene ciclos de disminución y ascenso
que sus antepasados registraban, y que duraban en promedio 52 años.
“Siempre, inclusive cuando no se le sacaba agua a la laguna, había veces que descendía, pero luego venían
los temporales y se volvía a llenar”, explicó.
“Se sabe que cuando el lago bajaba, los antepasados iban y enterraban en la orilla figuras de Tláloc y puntas
de flecha como ofrendas para que se volviera a llenar”.
De acuerdo con la Comisión Estatal del Agua (Jalisco), entre 1948 y 1955 Chapala pasó de estar al 69 por ciento de su capacidad, a sólo al 12, para luego comenzar un proceso de recuperación.
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